Un gato deprimido y solitario encuentra a Heidi: su nueva humana de 91 años
Tiger es un guapo gato de nueve años. Estaba solo y deprimido tras la muerte de su humano y el traslado al refugio Felines&Friends de Santa Fe. Pero entonces la vida le trajo un nuevo gran amigo….
Tigre ya no comía, a menudo lloraba escondido bajo algún mueble. A pesar de los esfuerzos por hacerle sentir querido, los voluntarios del refugio, durante tres meses, no pudieron hacer más. Pero entonces algo cambió. Una mujer, Amy Spencer Summa, decidió adoptarlo para dárselo a su madre de 91 años, Heidi, que vive en una residencia de ancianos: «Desde que empezó la pandemia, vive aislada y además sufre una pequeña pérdida de memoria. Un día, mientras hojeaba una revista de gatos, dijo que quería uno. Afortunadamente, en su residencia de ancianos admiten animales, así que me puse inmediatamente en contacto con el refugio más cercano».
A Tiger se le dio una segunda oportunidad de dar y recibir amor. Ahora ya no se esconde y come con gusto. La nueva adopción le ha devuelto la vida, en el sentido más estricto de la palabra. De hecho, los gatos que sufren depresión suelen dejarse morir.
La mala racha que comenzó con la muerte de su humano y el traslado a un refugio ha llegado afortunadamente a su fin. Y así, ahora Tiger pasa sus días con Heidi, haciéndose compañía. Fue amor a primera vista entre ellos.