Nadie quería sacarla del refugio por su cara
Durante mucho tiempo, nadie prestó atención a la pequeña Bean, pero afortunadamente la gata encontró a su dueño después de todo. Bean no sólo tiene ahora un techo sobre su cabeza, sino que también se siente por fin verdaderamente querida.
La mujer se llama Francesca y vive en Alemania y se trasladó a este país cuando decidió adoptar un gato. Quería que su casa fuera un nuevo hogar no sólo para ella, sino también para un animal abandonado. En la página web de uno de los refugios, Francesca se fijó inmediatamente en un gato de aspecto inusual. Tenía un color interesante y una cara divertida con el ceño fruncido. Comprendió que eso era lo que quería.
Algún tiempo después de que Francesca presentara su solicitud al refugio, recibió una respuesta del personal del mismo. El caso es que los voluntarios simplemente no creían que nadie quisiera realmente acoger a este gato. Durante el tiempo que ha estado en el refugio, nadie la ha mirado. Así que el personal pensó que Francesca estaba confundida por algo. Esta respuesta no sólo la sorprendió, sino que la emocionó y la hizo llorar. Le dio mucha pena el pobre gatito.
En su primer encuentro, Francesca y Bean congenian inmediatamente. Cuando Francesca vio a su nuevo gato, se puso inmediatamente a acariciar sus pies.
Los trabajadores del refugio compartieron la historia de Bean con la mujer. Resultó que esta belleza fue encontrada en un parque de remolques abandonado. La niña tenía un montón de enfermedades, que los veterinarios combatieron con ahínco.
Después de este encuentro, Francesca tuvo que terminar con la mudanza, y Bean iba a ser trasladado a la casa ya hecha. Fueron unas horas terriblemente difíciles para Francesca al verse separada de su nueva mascota.
Al día siguiente Bean ya estaba en casa de Francesca, y hay que decir que la pequeña no estaba confundida. El gato encontró inmediatamente un lugar blando en la cama del amo y se quedó dormido.
Ahora Bean y Francesca son amigos inseparables. Está tan apegada a su ama que a veces incluso le impide hacer sus tareas habituales y la mantiene cerca de Francesca para ella. La gata, que ha estado sola durante tanto tiempo y no ha conocido el verdadero amor, probablemente tiene miedo de perder a su ama, y por eso expresa activamente su afecto por ella.