Perro llevó a casa un dulce cachorro, que pero resultó ser de oso
Una pareja estaba de visita en el condado de Washington, Virginia, cuando se dieron cuenta de que su perro tenía una extraña criatura en la boca. ¡Fue toda una sorpresa! Se trataba de un cachorro de oso negro que el perro trajo a casa, de pocos días de edad, y que estaba deshidratado. No había rastro de su madre.
El dueño del cachorro no sabía dónde lo había llevado el perro, así que lo llevaron al Centro de Vida Silvestre de Virginia. El cachorro fue recogido por un biólogo que se dirigió al lugar.
El equipo de rehabilitación se hizo cargo del osezno, que tiene aproximadamente dos-tres semanas.
Un perro lleva a casa a un cachorro de oso
Amanda Nicholson, directora de divulgación del Centro de Vida Silvestre, dijo a Boredpanda:
«Este fue un maravilloso ejemplo de trabajo en equipo para proporcionar lo necesario a un animal salvaje».
El bebé pesó 540g y parecía estar en buen estado de salud. También estaba deshidratado. El bebé fue colocado en una incubadora y se le dio una dieta saludable que incluía todos los nutrientes que necesitaba para crecer.
Tras ganar algo de peso y fortalecerse, el osezno fue trasladado a su hábitat, donde pudo ser adoptado por una nueva madre osa. El osezno fue adoptado por su madre y ahora vive felizmente en su hábitat con su hermano.
Wildlife Center of Virginia acoge animales salvajes de la naturaleza. No es raro que se adopten animales salvajes como mascotas.
Según el Centro de Vida Silvestre de Virginia:
Tratamos a más de 3.000 animales salvajes al año en nuestro hospital. Muchos llegan heridos o enfermos. Nuestro equipo de veterinarios está siempre disponible para ayudar con cualquier tratamiento o cirugía.
Addnadio para el personal:
«También aceptamos animales sanos, pero abandonados. El equipo de rehabilitación se ocupa de ellos hasta que pueden vivir de forma independiente en su hábitat natural. Colocamos a este oso en una incubadora, y lo alimentamos con una dieta especial para satisfacer sus necesidades nutricionales».
Aunque el pequeño oso sólo pesa algo más de medio kilo, creemos que pronto alcanzará los 250 kilos.
El osito tiene una mamá adoptiva que le da el amor y los cuidados que necesita.
Aunque se desconoce el motivo de su orfandad, lo cierto es que la vida del perro se salvó al ser descubierto.