Agentes de la Armada avistaron un elefante en el agua a 16 km de la costa
La Armada de Sri Lanka realizaba una patrulla rutinaria de verano cuando divisó a un elefante que intentaba mantenerse a flote en el mar. El enorme animal se había alejado de alguna manera decenas de kilómetros de la costa. Las autoridades dijeron que el animal había perdido la orientación debido a una fuerte corriente cuando intentaba cruzar una pequeña masa de agua en una reserva natural cercana.
«Suelen cruzar pequeños ríos o incluso atravesarlos a nado», explicó el agente. Las corrientes resultaron ser demasiado fuertes para este elefante, que fue arrastrado. Ante la incapacidad del elefante para salvarse en esas condiciones, los valientes oficiales de la marina tomaron cartas en el asunto.
El elefante intentaba desesperadamente mantenerse a flote y seguía respirando por la trompa. Los agentes se pusieron el equipo de buceo y se sumergieron en el agua. Cuando llegaron al desafortunado gigante, intentaron agarrarlo atándolo con cuerdas. Incluso mientras se retorcía en el agua, parecía darse cuenta de que había sido rescatado.
Por ello, permaneció montada y permitió que los expertos realizaran las labores de rescate. Un oficial de la marina se subió al lomo del elefante para ayudar a calmar al animal. Utilizando cuerdas, lo llevaron poco a poco a la orilla.
Los expertos en fauna salvaje les esperaron en la orilla y examinaron la herida. Tenían que asegurarse de que el animal estaba sano e ileso antes de devolverlo a la naturaleza.
Así, la difícil operación de rescate concluyó con éxito.