Tucker, el gato de los ojos tristes, tuvo su final feliz

Se llama Tucker y le han puesto el apodo de «el gato más triste del mundo» por su peculiar expresión. Tucker tiene alrededor de un año y tiene un aspecto bastante inusual debido a una anomalía genética. Ya sea por su aspecto, por el hecho de que necesita cuidados constantes o por alguna otra razón, sus antiguos humanos la llevaron y la dejaron en el refugio Purrfect Pals de Arlington, Washington, porque ya no querían mantenerla.

La anomalía genética que padece también hace que su piel sea muy fina y que su pelaje se caiga con facilidad, dejando lugar a costras y moratones. Por ello, el refugio creyó conveniente que llevara una camiseta y un leotardo para evitar que se le cayera el pelo y se formaran costras y moratones.

La gata Tucker es muy cariñosa y juguetona: le gusta jugar con pelotas y ratones de cuerda y le encanta sentarse en su regazo y acurrucarse. Después de que Purrfect Pals publicara el llamamiento a la adopción, los voluntarios recibieron una avalancha de solicitudes de adopción de todo el mundo. Parece que el pequeño Tucker ha roto muchos corazones.

De todas las solicitudes recibidas, la afortunada que pasará su vida con Tucker es una mujer llamada Katie. Se sabe de ella que trabaja en una clínica veterinaria y que ya tiene experiencia en el cuidado de gatitos con necesidades especiales. Ella y su marido ya tienen un gato llamado Po que, al igual que Tucker, necesita atención y cuidados constantes.

Un portavoz de Purrfect Pals dijo: «Katie trabaja en una clínica veterinaria y ella y su marido tienen mucha experiencia en el cuidado de gatitos con necesidades especiales. De hecho, ya tienen un gato, Poe, con muchos de los mismos problemas que Tucker. Su piel se desgarra y rasga con mucha facilidad y además tiene una deformación en las patas. Katie ha confeccionado ropa protectora a medida para Poe y su casa ya está a prueba de gatitos con necesidades especiales. No podríamos soñar con una adopción mejor para Tucker».

Bueno, qué podemos decir… ¡que tengan una vida maravillosa Tucker y su familia!

Articoli correlati